“Se acerca su liberación”

Oración inicial

Señor, te pido que me abras el corazón y la mente para que pueda escuchar tu palabra y entender tu voluntad. Ayúdame a ser receptivo a tu mensaje y a vivir según tus enseñanzas. Amén.

 

¿Qué dice el texto?

Lectura del santo Evangelio según San Lucas (25-28.34-36)

Estando ya en Jerusalén, dijo Jesús a sus discípulos: «Habrá fenómenos extraordinarios en el sol, en la luna y las estrellas. En la tierra naciones enteras se llenarán de angustia y desesperación al oír el estruendo del mar y el oleaje.

Y la gente quedará sin aliento por el terror y la expectativa del peligro que amenazará a la tierra, cuando tiemble el ejército de los astros en el cielo. Entonces verán al Hijo del hombre venir en una nube, con poder y gloria inmensa.
Cuando comiencen a suceder estas cosas, levántense con la frente erguida, porque se acerca su liberación.

Tengan cuidado: no se dejen aturdir por el desenfreno y la embriaguez, ni por las preocupaciones diarias; así no podrían escapar cuando llegue de repente ese día, pues va a tomar por sorpresa a todos los habitantes de la tierra. Permanezcan en vela, pidiendo a Dios en todo momento la gracia de salir sanos y salvos de todo esto que va a suceder y de presentarse con confianza ante el tv Hijo del hombre.»

Palabra del Señor.

Meditación

Estamos llegando al final del largo discurso apocalíptico. Jesús da un último consejo convocándonos a la vigilancia (Lc 21,34-35) y a la oración (Lc 21,36).

Lucas 21,34-35: Cuidado para no perder la conciencia crítica. “Cuidad que no se emboten vuestros corazones por el libertinaje, por la embriaguez y por las preocupaciones de la vida y venga aquel día de improviso sobre vosotros, como un lazo; porque vendrá sobre todos los que habitan toda la faz de la tierra”. Un consejo similar Jesús lo había dado ya cuando le preguntaron sobre la llegada del Reino (Lc 17,20-21). Él responde que la llegada del Reino acontece como un relámpago. Viene de repente, sin previo aviso. Las personas han de estar atentas y preparadas, siempre (Lc 17,22-27). Cuando la espera es larga, corremos el peligro de quedar desatentos y no prestar más atención a los acontecimientos “los corazones se embotan por el libertinaje, por la embriaguez y por las preocupaciones de la vida”. Hoy, las muchas distracciones nos vuelven insensibles y la propaganda puede hasta pervertir en nosotros el sentido de la vida. Ajenos a los sufrimientos de tanta gente del mundo, no percibimos las injusticias que se cometen.

Lucas 21,36: La oración como fuente de conciencia crítica y de esperanza. “Estad en vela, pues, orando en todo tiempo para que tengáis fuerza, logréis escapar y podáis manteneros en pie delante del Hijo del hombre. La oración constante es un medio muy importante para no perder la presencia de espíritu. La oración nos ayuda a profundizar en nosotros la conciencia de la presencia de Dios en medio de nosotros y, así, sacar fuerza y luz para aguantar los malos días y crecer en la esperanza.

 

Oración

Señor, te pido que me ayudes a estar atento y vigilante en mi vida diaria. Ayúdame a no dejar que mi corazón se entorpezca por la disipación, la embriaguez y las preocupaciones de la vida. Ayúdame a estar preparado para tu segunda venida y a vivir de acuerdo con tus enseñanzas. Amén.

 

Contemplación

Tómate un momento para reflexionar sobre tu propia vida y tu relación con Dios. ¿Estás siendo atento y vigilante en tu vida diaria? ¿Estás dejando que tu corazón se entorpezca por la disipación, la embriaguez y las preocupaciones de la vida? ¿Estás preparado para la segunda venida de Jesús?

 

Acción

¿Qué puedo hacer hoy para estar más atento y vigilante en mi vida diaria? ¿Qué puedo hacer para no dejar que mi corazón se entorpezca por la disipación, la embriaguez y las preocupaciones de la vida? ¿Qué puedo hacer para estar más preparado para la segunda venida de Jesús?

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