Jóvenes JEDIMI * PLUS… ¡A Ustedes les digo: levántense! (San Marcos 5, 41)

Con rostro sonriente y tranquilo, el Papa Francisco siempre dice a la juventud: “Jóvenes, la Iglesia está con Ustedes y los necesita…” Pero ¿qué es aquello, que al interior de la pastoral de la Iglesia necesitamos de los ellos? SU POTENCIAL Y DINAMISMO. Es decir, su creatividad, sus sueños, su valentía, su simpatía y sus sonrisas, su alegría contagiosa y también la pizca de locura que los jóvenes saben llevar a cada situación.

Pues, con la juventud enamorada de Cristo, la Iglesia rejuvenece, explora nuevos senderos, se vuelve más alegre y acogedora. Esto va de acuerdo con lo que dice la Exhortación Apostólica Postsinodal Christus Vivit, 1: “Vive Cristo, esperanza nuestra, y Él es la más hermosa juventud de este mundo. Todo lo que Él toca se vuelve joven, se hace nuevo, se llena de vida. Entonces, las primeras palabras que quiero dirigir a cada uno de los jóvenes cristianos son: ¡Él vive y te quiere vivo!”. 

En consecuencia, 20 jóvenes de la parroquia San Judas Tadeo en el Barrio Bastidas respondieron SÍ, al llamado de conformar el grupo juvenil JEDIMI * PLUS (Jesús Divina Misericordia * Reactivado); y así proponen a los demás jóvenes mantener la valentía de soñar y el deseo de vivir en grande.

Estos muchachos no están solos, por ello el P. Mario Arturo Monsalvo, párroco de esta comunidad, dijo: “Junto a dos (2) coordinadores Wilsón y Kate, estamos dispuestos a convertirnos en compañeros de camino como formadores, orientadores y consejeros; queremos ser compañeros de todos en lo que juntos emprendamos como trabajo y compromiso pastoral para realizarlo con celo apostólico, por amor a Dios y a la Iglesia”.

Desde este punto de vista, la Sinodalidad nos pide ver que en el trabajo con los jóvenes no existen los problemas, sino, por el contrario, las verdaderas soluciones y las esperanzas de nuestras familias y de nuestra sociedad. JEDIMI * PLUS… Dice: “PRESENTE EN BASTIDAS Y EN LA DIÓCESIS DE SANTA MARTA PARA SER SAL DE LA TIERRA Y LUZ DEL MUNDO” (San mateo 5, 13).