LABOR TITÁNICA EN MEDIALUNA

“Una labor titánica”. Esa expresión resume el proceso de mantenimiento del templo de la cuasiparroquia Nuestra Señora de La Candelaria en Medialuna, pastoreada por el P. Jaisir Arroyo, quien tiene una feligresía con ganas de superar problemas con la fuerza del Evangelio.

El templo está en un pintoresco corregimiento de Pivijay Magdalena, ubicado a orillas del caño Shiller, fundado el 19 de marzo de 1777. Le llaman Medialuna, porque en su fecha de fundación la luna presentaba su fase de cuarto creciente (Medialuna) y también porque donde hoy está la plaza habitaba un señor de apellido Luna.

Este nombre también está ligado a situaciones de victoria frente adversidades, y se nota que el P. Jaisir vio la película Titanic, porque dice sonriente: “luego de una labor titánica, la comunidad de Medialuna ha embellecido su templo con recursos obtenidos a través de ventas de comida, rifas y ayuda de benefactores que se meten la mano al bolsillo y aportan para tener un templo digno donde alabar a Dios a través de la liturgia”.

En esta labor, han desarrollado tres frentes para el mantenimiento del lugar de culto, que consisten en el trabajo de la cubierta, cúpula, fachada principal, fachadas laterales y posterior; empezaron raspando las paredes del templo para luego pañetar las fachadas que necesitaban curaciones.

Luego estucaron las cuatro fachadas y se hicieron acabados en columnas y capiteles para darle un nuevo estilo al templo; por último, usaron pintura de alta calidad tipo 1 y una buena coraza para darle resistencia al estuco y a los acabados. Este proceso, unido al trabajo de formación doctrinal, hace que la comunidad experimente la gracia del crecimiento en la fe.