“Martes 13, ni te cases ni te embarques”. Es algo meramente supersticioso; por ello de manera equivocada recomiendan no arriesgarse en esa fecha, por considerarse un día nefasto, de mal agüero para el amor, los negocios y demás asuntos importantes. Los cristianos no creemos en esas tendencias, y por ello el martes 13 de febrero en el barrio Manzanares vivimos una gran experiencia de fe.
A las 8:30 de la mañana empezó la peregrinación al Santuario Diocesano de Nuestra Señora de Fátima, coordinada por la Delegación de Pastoral de La Salud. Asistieron delegados parroquiales con Monseñor José Mario Bacci, quien dirigió el rezo del rosario a los pies de la Santísima Virgen por los enfermos, aprovechando que el 11 de febrero se celebró la fiesta de Nuestra Señora de Lourdes, Madre y protectora de quienes padecen dolores en el cuerpo o en el alma.
Luego siguió la Eucaristía, donde Monseñor José Mario expresó: “La Pastoral de la Salud da vitalidad a la Iglesia con sus visitas a los enfermos, que son experiencias fructíferas de evangelización, porque si nos quedamos sin ir a los enfermos, seriamos una Iglesia que sólo enseña, pero que no aplica lo que enseña. Exaltemos el trabajo de estos agentes de pastoral”.
